Aumento del grosor del pene con piel y colgajos de grasa.

método operativo para aumentar el grosor del pene

El método quirúrgico de engrosamiento del pene mediante el trasplante de piel y colgajos de grasa es una respuesta al efecto de corta duración del lipofilling subcutáneo. Si comparamos este método de agrandamiento del pene con la introducción de células grasas, entonces requiere grandes habilidades profesionales.

El engrosamiento del pene con piel y colgajos grasos implica una intervención más compleja, así como un alto riesgo de lesión. Por tanto, antes de realizar la operación, el paciente debe sopesar los pros y los contras.

Agrandamiento del pene mediante trasplante de piel y colgajos de grasa

La duración de la cirugía considerada, realizada bajo anestesia general, es de varias horas. Todo comienza con la recogida de trasplantes. La mayoría de las veces se trasplantan de la región glútea del paciente, ya que esta capa subcutánea se caracteriza por una mayor densidad y el número de tabiques de tejido conectivo. También puede usar piel y colgajos de grasa extraídos del área de la ingle.

El área del material extraído depende directamente del tamaño del órgano genital masculino. Como resultado, es posible que el cirujano no se limite a un solo implante. Después de suturar las áreas defectuosas del área donante, se realizan incisiones en el eje del pene. Un especialista inserta los colgajos de piel y grasa debajo de las capas superiores de la piel del falo. Cuando se completa el proceso de trasplante, el cirujano sutura las incisiones.

Como ya se mencionó, la piel del donante y los colgajos de grasa se toman con mayor frecuencia de la región glútea. Este material cuenta con un menor contenido de grasa, por lo que no pierde tanta densidad durante el proceso de trasplante. Las células del tejido adiposo de los colgajos glúteos en el proceso de sentarse experimentan la presión del tronco, por lo tanto, tienen una estructura más densa.

¿Cuáles son las indicaciones y contraindicaciones?

cómo aumentar el grosor del pene

Un grosor insatisfactorio del pene puede provocar problemas psicológicos graves. Esto puede tener un impacto negativo tanto en la autoestima de un hombre como en su éxito en la vida íntima. Como resultado, las indicaciones para la operación son de carácter médico, psicológico y estético.

En cuanto a las contraindicaciones, un hombre deberá someterse a un examen antes de realizar una operación para engrosar el pene. La intervención quirúrgica será cuestionable si el paciente se enfrenta a problemas mentales, genitourinarios, cardiovasculares o inmunológicos.

Es importante prestar atención a la capacidad de coagulación de la sangre y también asegurarse de que no haya daños en la piel del pene ni en la zona donante (glúteos, ingle). La lista de contraindicaciones se complementa con diabetes mellitus y procesos inflamatorios.

Periodo de rehabilitación y resultados

Por un lado, el trasplante de piel y colgajos grasos permite lograr un efecto más prolongado que el lipofilling, pero por otro lado, los implantes desprovistos de epidermis pueden ser rechazados, ya que el aporte de sangre al material utilizado es inadecuado. No deben excluirse los riesgos de cambiar los contornos del tronco del pene debido a la densidad desigual de los injertos naturales.

Ante los altos riesgos de rechazo de la piel y los bloques grasos y la aparición de procesos inflamatorios, los especialistas desaniman cada vez más a los pacientes de dicha intervención quirúrgica, recomendando un procedimiento con trasplante de colgajo muscular.

resultados del método operativo de engrosamiento del pene

Esta operación permite mantener el correcto suministro de sangre a los injertos y también garantiza un engrosamiento del pene de por vida.

Las ventajas y desventajas de usar colgajos de piel grasa incluyen las siguientes:

  • , a diferencia del lipofilling, se observa un resultado más estable;
  • a pesar de las cicatrices, la estética se conserva en la zona donante;
  • el material usado pierde densidad mínima.

Desventajas:

  • aspecto financiero del problema;
  • riesgos de rechazo de piel y colgajos de grasa;
  • la probabilidad de deformación del tronco del falo;
  • el riesgo de supuración posoperatoria de la herida.